Sándwich de jamón y queso WOW: hazlo perfecto | Campi®

Sándwich de jamón y queso: Descubre cómo hacer que queden perfectos

Sándwich de jamón y queso: Descubre cómo hacer que queden perfectos

¿Sabías que hay 7 secretos para hacer un sándwich de jamón y queso perfecto? Si eres de los que disfruta impresionar con la comida, vas a sacar muchos wow con estas preparaciones Campi®.

Sándwich de jamón y queso

A primera vista, parece que hacer un sándwich de jamón y queso es algo simple, y tienes razón, pero, que sea simple no significa que no tengas mucho por aprender.

Al igual que ocurre con todas las comidas; el éxito de un sándwich de jamón y queso depende de combinar bien texturas y sabores. A continuación, te presentamos los 7 pasos del sándwich perfecto.

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1. Elegir el pan perfecto para el sándwich perfecto

Además de que es el soporte en este plato, el pan aporta lo crujiente. Estos son algunos tips importantes para elegir el pan.

  • El pan de molde tajado es la mejor opción para un sándwich de jamón y queso; puede ser blanco o integral, pero siempre en rebanadas delgadas.
  • Los panes blancos son más blandos que los integrales; de hecho, mientras más nueces y semillas tenga el pan, más firme y resistente será a la humedad que suelta el queso cuando se derrite.
  • Si eliges panes tipo brioche, recuerda que suelen contener azúcar, esto hace que al momento de dorarlos el pan se queme fácilmente.
  • Las barras de pan o pan baguette son mejores para sándwiches más elaborados como los de carne con ensaladas, o para el sándwich de huevo que tiene más humedad.

2. La “ciencia” detrás de dorar el pan para un sándwich de jamón y queso perfecto

El pan del sándwich de jamón y queso siempre se debe dorar previamente (si se consumirá frío) o, luego de armar el sándwich (si se consume caliente). Sin embargo, detrás de este sencillo acto, hay toda una ciencia.

Dorar consiste en someter un alimento al calor hasta que los carbohidratos y aminoácidos en él produzcan una reacción química que cambia su color y sabor. A esa reacción se le llama “reacción de Maillard”, usa esa información para impresionar a tus amigos o a tu familia. (Riunet.upv.es Cardona, S. (2020)

Un dorado perfecto se logra a 160° C, pero a esa temperatura el pan se reseca demasiado; por eso, hay que agregar un poco de grasa a la plancha o sartén para darle jugosidad y sabor. Te recomendamos Esparcible Campi® WOW.

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3. ¿Quieres sándwiches dignos de un WOW? ¡Aprende todo sobre el jamón!

¿Vas por la vida sin saber la diferencia entre todos los tipos de jamones? Pues es hora de que los conozcas. Esta sencilla guía de jamones te mostrará sus principales características y cómo elegir el mejor.

Un jamón es, básicamente, un alimento hecho con las patas traseras del cerdo. Estos pueden ser de dos tipos: cocidos o curados. Los jamones de tipo “cocidos” se cuecen en agua salada y luego se prensan en moldes cuadrados; (de allí, la forma cuadradita perfecta para nuestro sándwich de jamón y queso). 

Los jamones curados, en cambio, se procesan crudos. Se les extrae los líquidos; se prensan y se almacenan durante meses (incluso años). Su “cocción” es por efecto de la sal pura con que se cubren; la cual los deshidrata y ayuda a preservar. 

El proceso de “curar” la carne es muy sofisticado. Requiere de controles, equipo y personal especializado, por eso, los jamones curados (como el ibérico, el serrano, de bellota, etc.) son mucho más costosos. Ambos tipos de jamones también pueden ser ahumados. Esto les da ese particular gusto y una consistencia más firme.

4. Cómo elegir el jamón ideal de tu sándwich de jamón y queso 

Casi todos los jamones curados son de excelente calidad, por eso su elección se limita a tu presupuesto. Para elegir un buen jamón cocido, en cambio, hay un factor a tener en cuenta: el porcentaje de carne.

En un jamón cocido de calidad superior la etiqueta debe indicar “jamón cocido extra”. Esto significa que contiene más carne y menos grasa. Sea cual sea tu elección, de vez en cuando, atrévete a probar una versión diferente para preparar tu sándwich de jamón y queso. (Ecured. (s.f.). Jamón. Ecured.cu)

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 5. Es el momento de agregar el queso

Como hemos dicho, una comida perfecta no es otra cosa que una combinación de texturas y sabores. Así, el queso es el toque cremoso. Para elegirlo bien sigue estas sencillas reglas:

  • Si el sándwich se va a consumir frío, el queso debe ser firme y de gusto intenso, por ejemplo, el cheddar. 
  • También puedes emplear queso crema si se trata de un sándwich frío de jamón curado.
  • Para sándwiches calientes, el mejor queso es el mozzarella porque se derrite fácilmente, pero mantiene una textura agradable al paladar. Una lonja será suficiente para cada sándwich. 

6. Antes de servir: cortar o no cortar, ¡he ahí la cuestión!

El sándwich de jamón y queso se suele cortar en diagonal antes de servirlos. ¿Sabes por qué?

  1. Hace más fácil su manipulación.
  2. Evita que se rompa por la mitad accidentalmente al comerlos; ya que el queso siempre ablanda el sándwich en el centro.
  3. La forma triangular lo hace perfecto para llevar en las loncheras de los niños.

En resumen, la secuencia para hacer tu sándwich perfecto es: dorar los panes a fuego lento 3 minutos por cada lado; retirar las rebanadas del calor y untarlas con esparcible WOW de Campi®; colocarlas de nuevo a la plancha hasta que doren bien. 

Coloca el relleno de jamón y queso en una rebanada de pan, tapar con otra, aplastar con una espátula hasta que se derrita el queso y, listo, ¡a disfrutar!

BIBLIOGRAFÍA.